Durante mucho tiempo, la historia y evolución del mejor amigo del hombre ha sido un misterio. Y todavía hay mucha especulación al respecto. Pero la ciencia ha logrado desvelar algunos que nos arrojan luz sobre esta incógnita. De este asunto tan interesante quiero hablarte hoy desde Un Blog Universal. ¿Te interesa saber?
Ante todo, quiero dejar claro el lugar del perro en el reino animal. Lo que llamamos “perro” es una subespecie llamada Canis lupus familiaris, que pertenece a la especie Canis lupus (lobo), de la familia Canidae.
¿Qué significa esto? Que los perros son básicamente lobos, pero domésticos. Y que, además de con las otras subespecies de lobos, están emparentados con el dingo y el chacal de lomo negro. Sin embargo, no tienen una relación tan íntima con otros cánidos como el chacal común y el coyote, que pertenecen a la familia Canidae pero no a la especie de los lobos.
Los científicos creen que el perro surgió hace unos 14 o 15 millones de años en algún lugar de Eurasia. De hecho, el primer cánido del que tenemos registro fósil es el Prohesperocyon, datado en 40 millones. Y los ancestros de los lobos y chacales surgieron hace unos 30 millones de años o un poco más.
Cabe decir que el perro, más que descender del lobo gris como se creía antes, comparte un ancestro común que ya no existe en la actualidad. Algo parecido a lo que ocurre entre el ser humano y el chimpancé.
A diferencia de sus hermanos de la especie Canis lupus, los perros enseguida se acercaron a las comunidades humanas. Ello se debe probablemente a una condición genética llamada síndrome de Williams-Beuren. Tanto en los humanos como en otros animales, este síndrome causa trastorno mental e hipersociabilidad.
Esto no significa que los perros que se acercaron por primera vez a los humanos tuvieran retraso mental. Pero sí hay evidencias de que los perros presentan esta condición genética más que los lobos y otros animales menos sociales. En el pasado, la alteración de los genes involucrados hizo que el miedo cediera el puesto a la afabilidad. Y esto constituyó una ventaja evolutiva al propiciar la alianza entre perros y humanos.
Cabe decir que los restos de perro doméstico más antiguos que se conocen, fueron encontrados en la cueva de Goyet (Bélgica). En la zona habitaba la cultura conocida como auriñacience, que vivía en cuevas y se dedicaba principalmente a la caza. Así que es bastante posible que los humanos los emplearan en la caza desde los primeros momentos.
Esta suposición también se basa en grabados hallados en Arabia Saudita y algo más recientes (6.000 – 7.000 antes del presente), así como restos en Rusia, Suiza y Alemania, que muestran a los perros cazando junto con los humanos. Más adelante, civilizaciones antiguas como la egipcia y la romana dejarían muchas evidencias del perro no solo como cazador al servicio de los humanos, sino como animal de compañía.
Ahora que sabes cómo surgió el perro e hizo contacto con el ser humano, te invito a compartir esta publicación o dejarme un comentario para que otros amantes del mejor amigo del hombre sepan más sobre el tema. Y no dejes de suscribirte si quieres estar al tanto de todo lo que publicamos en el blog.
Esta entrada ha sido publicada el 24/08/2020 11:30