El amor es uno de los grandes motores impulsores para la mayoría de nosotros. Sin embargo, hay quienes se empeñan en deslucir ese hermoso sentimiento, intentando racionalizarlo y restarle importancia. Por eso, hoy te traemos algunas curiosidades científicas sobre el amor.
Pues la ciencia, como podrás apreciar, también ha estado sumamente interesada en los sentimientos que nos mueven y nos transforman, como el amor.
Prepárate para quedar asombrado con estos datos. ¿Comenzamos?
Según la opinión científica, el amor es un proceso neurológico altamente complejo, que implica a diferentes partes del mismo: el área tegmental frontal, el hipotálamo, la amígdala, la corteza prefrontal y el núcleo accumbens.
En cuanto a las hormonas que intervienen en el enamoramiento, las principales son la oxitocina y la vasopresina, aunque no son las únicas. Estas hormonas influyen tanto en hombres como en mujeres, y son las responsables de los distintos tipos de amor que sentimos.
El amor no sólo cala en nuestros sentimientos, sino también en nuestro cerebro.
Ya que según una investigación de la Universidad de Ciencias y Tecnología de Hanui, las personas enamoradas presentan, bajo resonancia magnética funcional, una mayor actividad en las áreas cerebrales que se asocian con las habilidades sociales, la motivación y la recompensa.
Según la ciencia, el amor a primera vista es más parecido a una fuerte atracción, que al amor en sí. Y, por cierto, se requieren tan sólo de 4 minutos para causar una primera impresión favorable o no, en esa persona que nos atrae.
Obviamente si esa persona ha sentido el “flechazo” también, las cosas se nos facilitarán.
Ante la pregunta más frecuente, ¿pueden hombres y féminas ser solamente amigos? Según la Universidad de Wisconsin, NO.
Un estudio basado en el comportamiento de más de cien estudiantes de la propia universidad, concluyó que la amistad entre personas de sexo opuesto no era posible, ya que comprobó que al menos una de ellas, cuando no las dos, terminaban por desarrollar en algún momento cierto grado de atracción sexual.
Esto es fundamentalmente porque los hombres y las mujeres tienen una percepción totalmente diferente de los mensajes que reciben del sexo opuesto, interpretando “señales” en donde no las hay. Es así que, no podremos dejar de evitar situaciones incómodas y confesiones de amigos, y la “friend zone” seguirá siendo una tortura por los siglos de los siglos.
El amor es sin dudas adictivo, pero quizás eso lo sabías sin que la ciencia te lo dijera. Bueno, ahora ya conocerás la razón que fundamenta esta afirmación.
Según algunos científicos de la Universidad de Montreal, el amor y el deseo sexual activan el núcleo estriado del cerebro, que además está asociado con las adicciones a las drogas.
Es así que, el proceso del enamoramiento y el amor, es el mismo que el de las personas adictas. Pues tanto el amor como las drogas, inundan el cerebro con dopamina. Lo que nos conduce a entrar en el círculo vicioso de euforia, deseo, abstinencia y dependencia.
¿Cuál de estas curiosidades científicas sobre el amor te ha impresionado más? Esperamos que ninguna te impida seguir disfrutando de este sentimiento, para el cual (como última curiosidad adicional) estamos genéticamente predispuestos.
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Esta entrada ha sido publicada el 05/01/2021 12:00